Yo no puedo existir sino a tu lado
Mi alma ya se rindió a tu corazón,
Porque un mismo destino nos ha atado
Con lazos encantados a los dos.
Y entre tanto que el tiempo hora por hora
Veloz huyendo va,
Mi triste canto que en la sombra llora
Va tu frente a tocar.
Yo soy el labio, tú eres la sonrisa;
Yo soy la lira, y tú la inspiración;
El arbusto soy yo, tú eres la brisa;
Eres tú la belleza, y yo el amor.
Y entre tanto que el tiempo hora por hora
Veloz huyendo va,
Mis triste canto que en la sombra llora
Va tu frente a tocar.