¡Oh! Si pudiera imitar
Al cantar tu cumpleaños
De las fuentes el murmullo
Y de las aves el canto!
¡Oh!! ¡si pudiera encontrar
Notas divinas mi labio;
O divinas melodías
En mi cítara mi mano!
Si el cielo me diera luces
Y flores los verdes campos,
Para adornar tu belleza,
Para pintar tu recato;
Con cuanto placer entonces
Alzara un canto mi labio
Y que guirnalda tan linda
Ciñera en tu frente ufano!
Pero ¡ay de mí! ni una flor
De ti digna encuentro al paso,
Pues sólo penas descubro
Donde otros dichas hallaron,
Y mal se aviene por cierto
Con mi dolor y mi llanto
Ver tu inocente alegría
Porque cumples catorce años.
Un cumpleaños debiera
Ser lamentado con llanto
Más bien que con regocijo
Y sonrisas celebrado,
Pues cada año se lleva
Una ilusión un encanto,
Y sólo tristes recuerdos
Dejan los años pasados
Un año más, es decir,
Un año más descontado
Del número de los días
Que nos están reservados;
Un año menos de vida.
Un año más de trabajos,
Mil esperanzas desechas
Y mil recuerdos amargos.
Si los años venideros
Nos parecen siempre gratos,
Es por los recuerdos tristes
Que dejan los que pasaron
Y porque el día presente
Sólo ofrecen desengaños.
Esperamos del futuro
Algún alivio, algún cambio,
Pero ese futuro llega
Sin el consuelo esperado.
¡Y tú en tanto... satisfecha
Porque cumples catorce años!
Tú, que te alejas ahora
De la infancia y sus halagos;
Tú, que con ojos de niña
El mundo aún no has divisado,
Cegada por las quimeras
Que en nuestra niñez formamos;
Tú que has visto de la vida
Sólo el albor sonrosado,
Y envuelta en los oropeles
Que prestan los pocos años
No has formado en tu cabeza
Sino sueños encantados,
Con la sonrisa en los labios,
Con el rubor en la frente
Y el corazón en las manos;
Y no comprendes aún
Que del mundo los halagos
Manchan la frente y nos dejan
El corazón en pedazos,
Disipados esos sueños,
Trocada esa risa en llanto.
No sabes lo que abandonas
Dejando el tiempo pasado,
¡Y te muestras satisfecha
Porque cumples catorce años!
Anhelas el porvenir,
Y él te rinde preparados
Largos días de amargura,
Años tal vez de quebranto...
¿Lo dudas? Guarda estos versos
Y déjalos olvidados,
Como una cosa perdida,
Siquiera por cuatro años.
Vuelve entonces a leerlos,
Cumplido tan corto plazo,
Y verás como tus ojos
Anubla entonces el llanto;
Y de aquí allá, cuántas veces
Habrá su raudal amargo
Empapado esas mejillas
Que hoy sonríen sin descanso.
¡Cuántos objetos queridos
Tendrás de menos al lado!
¡Cuántas muertas ilusiones!
¡Cuántos perdidos encantos!
Y quiera el cielo que entonces
Tu corazón desgarrado
No haya sentido de amor
Los destructivos halagos.
Lee mi cuelga, y tributa
Un recuerdo a tu pasado,
Y una lágrima siquiera
A tu ya difunto hermano;
Y entonces te asombrará,
Mis palabras repasando,
Que hoy estés satisfecha
Porque cumples catorce años.