Yo que tengo la voz desparramada,
Yo que tengo el afecto dividido,
Yo que sobre las cosas he vivido
Siempre con la memoria derramada;
Yo que fui por la tierra desolada,
Yo que fui bajo el cielo prometido
Con el entendimiento repartido
Y con la voluntad multiplicada;
Quiero poner ahora la energía
De la memoria, del entendimiento
Y de la voluntad en armonía
Con la memoria que no olvida nunca
Con el entendimiento siempre atento
Y con la voluntad que no se trunca.